de/di Luis Alberto de Cuenca
(Trad. Marcela Filippi)
Es la hora en que las agujas
del reloj se aproximan tanto
que se funden en una sola.
Al otro lado de los muros
del castillo, la tempestad
ruge como un león herido.
Es medianoche, la hora bruja
en que se forjan los desórdenes,
los cadáveres cobran vida
y los deseos se disparan.
Solos en el salón inmenso
lleno de viejas armaduras,
los hermanos devoran libros
escritos en griego y latín
y se miran de cuando en cuando
a los ojos, como diciéndose
que en el mundo no existe nada
más que esos libros y la noche.
Catorce años tiene ella,
ojos glaucos, labios de púrpura
y piel muy blanca de vampira.
Él, dieciséis, y el pelo largo
(más que el de ella), y un aspecto
entre lo ambiguo y lo enfermizo.
No sé por qué los he soñado
a estos dos la noche pasada.
Puede que ambos representen,
poniéndonos en plan simbólico,
dos conceptos en apariencia
contradictorios, pero unidos
para siempre en los dos hermanos:
Feudalismo y Revolución.
È l'ora in cui le lancette
dell'orologio si avvicinano tanto
che si fondono in una sola.
Dall'altra parte delle mura
del castello, la tempesta
ruggisce come un leone ferito.
È mezzanotte, l'ora della strega
in cui si forgiano i disordini,
i cadaveri prendono vita
e i desideri deflagrano.
Soltanto nel salone immenso
pieno di vecchie armature,
i fratelli divorano libri
scritti in greco e latino
e si guardano di tanto in tanto
negli occhi, come a dire
che al mondo non esiste nulla
oltre a quei libri e alla notte.
Quattordici anni ha lei,
occhi glauchi, labbra di porpora
e pelle molto bianca da vampira.
Lui, sedici, e capelli lunghi
(più dei suoi), e un aspetto
tra l'ambiguo e il gracile.
Non so perché li ho sognati
questi due ieri la notte scorsa.
Può essere che entrambi rappresentino,
ponendoci su un piano simbolico,
due concetti in apparenza
contraddittori, ma uniti
per sempre nei due fratelli:
Feudalesimo e Rivoluzione.
(De Bloc de otoño. Colección Palabra de Honor. Visor Poesía, Madrid , 2018)